lunes, 25 de abril de 2016

Publicación de Las voces que me dicen de Fernando Pessoa


Fernando Pessoa nació en Lisboa en 1888. Estudió en Durban (Sudáfrica), y se presenta a las pruebas de acceso a la Universidad de El Cabo, sin conseguirlo. De vuelta en Portugal en 1905 se dedicó profesionalmente a la traducción y a la redacción de correspondencia comercial para empresas. Simultáneamente realiza una intensa actividad literaria (mayoritariamente inédita a su muerte), y bajo el nombre de diversos heterónimos. Muere también en Lisboa en 1935 a causa de la cirrosis.
Él mismo reconoce que buena parte de su producción se encuentra disperso en diversas revistas y otras publicaciones: artículos, poemas, ensayos irán apareciendo en Orpheu, Atena, Presença. Su primer poemario fue Antinous (1918), escrito en inglés. También en ese idioma le seguirán 35 Sonnets, e English Poems I-II, y un tercer volumen. La única publicación en vida en portugués fue Mensagem. 

lunes, 18 de abril de 2016

Reseña de Leves alas al vuelo de Rafael González Serrano

A veces lo novedoso llega callado, sin roce ni palmada.
A veces los cambios se muestran en la trayectoria de lo que pudo ser habitual y giró para evolucionar.
Así ha ocurrido con el último libro de mi querido Rafael González Serrano: Leves alas al vuelo (Editorial Celesta).
Ha aparecido en silencio, como la novedad que impone pero no avasalla, con la humildad de lo exquisito que no escandaliza, en la certeza de la conciencia que sugiere.
Leves alas al vuelo es un combinado servido por un barman en el refugio clandestino de la ciudad donde impera la Ley seca. Sus versos son tragos saboreados al compás de un piano con doble fondo, en el cual se guardan los licores esenciales del pecado y los sentimientos. Su forma es la forma personal de un inventor de chasquidos y recursos, de un profeta de la realidad, de un silente enamorado, de un espectador de la vida y de la muerte.
Atrás ha quedado el poeta metafísico y oscuro, el críptico creador que nos hacía bucear en construcciones profundas llenas de sentido.
Ahora, en este libro, transcurre nuestro camino de lectura en bocanadas sencillas, en conceptos minimalistas, en iluminaciones descubiertas al trasluz de nuevas formas (duinos, aporismos o aladas)
Poco más.
Sólo la recomendación de leerlo y comprobarlo.
Y disfrutar. Mucho.


CXIII

En la derrota
se fragua el destino
alimentado.


CXXI

En la tormenta
se funda la fuerza que
trae la calma.


La muerte nos censura en su cita
los años que no supimos vivir.


Desnuda,
               sin adjetivos,
la palabra tiembla
de carencias,
               se sumerge
en las tinieblas, entre
los umbrales
        del silencio, cuando
el exilio es
                una apuesta
y el único ropaje
con que envolver
                la soledad.

Enlace a página original: http://diariodeimprovisaciones.blogspot.com.es/2016/03/letras-ajenas-rafael-gonzalez-serrano.html                                       

lunes, 11 de abril de 2016

Lectura de Paseantes hoy en Barcelona

Pepe Jesús Sánchez en el Cercle Artistic San Lluc

El poeta inglés Samuel Taylor Coleridge escribió:”Si un hombre atravesara el Paraíso en un sueño y le dieran una flor como prueba de que había estado allí, y si al despertar encontrara esa flor en su mano…¿entonces qué?”  dando origen así a  la idea de que una gran parte  de la creación literaria es obra no de lo que llamamos autor (el autor Tal en minúscula) sino del Espíritu Dios, la Computadora Universal o como quieran Uds. llamarle. Posteriormente, muchos grandes poetas, han sostenido también   la idea del único Autor (con mayúscula). Si bien no es  un hecho que se produzca con asiduidad en la práctica, ese sentimiento  de que alguien nos dicta, como en trance, un  texto, no es extraño a quien  frecuenta o haya frecuentado la escritura.  
Pepe Jesús Sánchez Marín en Paseantes hoy pareciera haber atravesado la floresta del sueño trayendo como prueba este poemario en el que la extrañeza de la poesía se ha consumado en la plenitud  de la parca a la vez que elocuente sencillez de la naturaleza. Él no pertenece a ninguna  generación, ni tampoco  a una  determinada escuela ni a tradición alguna. Es, como la gran mayoría de los escritores  de verdad, de sí mismo.
Que luego de haber visitado de la mano del poeta estos paisajes, estas  atmósferas diáfanas o sombrías, estos inventarios arrobados, algún lector especializado haya  querido entrever supuesta relación con las Baladas Líricas de Worsdworth podría  tal vez calificarse como acertado como podría serlo, también, el evocar a  Francis Ponge  en su  toma de partido por los objetos cotidianos, por las cosas en su rara exactitud de cosas o por los simplísimos componentes del paisaje de su singular itinerario poético. Pero tales alusiones y evocaciones supuestas tan son tan sólo palabras.
Creo, con Borges, que la materia con que se hace la poesía,  el lenguaje mismo,  es una creación estética. Creo también, con este nuevo  poeta, en que la belleza está acechándonos por todas partes, tanto en lo creado como naturaleza como en las efusiones del espíritu que las contempla.
Pero tal vez,  las distintas interpretaciones que ha suscitado la lectura de Paseantes hoy no sean más que palabras sobre palabras, creaciones sobre una creación. Una incitación, en fin, a la lectura de primera mano. Puesto que, como dijera el poeta Angelus Silesius allá por el siglo XVII:”La rosa sin porqué, florece porque florece”.
                     
Edgardo Oviedo Licardi